Entrevista con Alberto Alonso, Osteópata y Quiromasajista publicada en Hoy Digital
por Pilar Armero
Es una de las plantas con más propiedades y aplicaciones. Existen hasta 385 variedades distintas repartidas por todo el mundo. Lo que muchos no saben es que el aloe vera no es un cactus, aunque tenga pinta de pertenecer a esa especie, sino que se trata de una liliácea, familia del ajo y la cebolla. Alberto Alonso, osteópata y quiromasajista, va cantando sus excelencias por los mercados. Dice, incluso, que es una planta tan buena que él se hace ensaladas de aloe vera.
La verdad es que son más conocidas las aplicaciones estéticas y curativas de la planta, pero como alimento no se oye tanto hablar de ella. ¿Cómo se toma?
Yo me hago unas ensaladas estupendas. Lo que se aprovecha es la parte carnosa que se obtiene abriendo la hoja. Luego hay complementos elaborados que son buenísimos para muchas cosas, como el dolor de dientes de los bebés, la falta de energía o las depuraciones de colon.
¿Qué cualidades tiene la planta en general?
Según como se presente, en cremas, gel puro, gel para dolores musculares son distintas. Puede ser astringente, cicatrizante, regenerativo celular, relajante, depurativo, estimulante neurológico, es buenísimo también para la psoriasis A la hora de comprarlo hay que poner atención para evitar ser engañado; lo que hay que hacer es fijarse en que el ingrediente principal del compuesto que se vaya a comprar sea aloe barbadensis y no agua.
¿Cuánto tiempo hace que se conoce la planta?
Hace al menos 5.000 años. Se descubrió en la isla de Barbados, de ahí la denominación de barbadensis, que estaba repleta de este tipo de plantas. Los soldados las cargaban en sus caballerías cuando había alguna guerra. Lo hacían por su enorme poder cicatrizante.
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